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Adelanto del artículo:
La revolución ha iniciado. En la portada de
esta semana, EW viajó a Waikiki, Hawaii, donde los actores y el equipo estaban en
los días finales de la producción de la esperada secuela de Los Juegos del
Hambre, En Llamas (en los cines el 21 de noviembre). Así como la revolución que
podría animar a la gente de Panem descansa sobre los hombros de la joven Katniss
Everdeen, el éxito de la franquicia depende en gran medida de Jennifer Lawrence Después de pasarse todo un día escapándose de la muerte en una selva
cercana, la actriz de 22 años de edad, se ordenó una cerveza y se puso cómoda
en el balcón del Hotel Trump para discutir la secuela, su vida ahora como una
estrella taquillera, y su incapacidad para comportarse como la típica máquina de
Hollywood que todos esperan que sea. "Es casi como si subconscientemente no quisiera trabajar más, así que estoy tratando de arruinar mi carrera", dice con una carcajada en un momento, antes de inclinarse cerca de grabadora
del periodista. "Estoy embarazada", bromeó.
En su primer encuentro con el nuevo
director Francis Lawrence ("Escupí huevo dentro de su boca cuando estaba
hablando. Dentro de su boca") a la fiesta que se organizó para el elenco y
el equipo de Catching Fire ("Cuando Sam entró yo estaba persiguiendo a Woody y
dimos vuelta mi sofá y Woody tenía un calcetín hasta el fondo de mi garganta...
"), Lawrence fue franca y divertida y consciente de sí misma. "Estoy
muy consciente de toda la mierda que rodea a Hollywood ", dice ella,"
y como todo el mundo se sube al trono y piensa que está curando el cáncer y eso
me hace muy incómoda cada vez que lo veo. Así que voy en la dirección opuesta y
termino diciendo algo así como "¡Estoy embarazada!" cuando estoy en
dos franquicias".
Luego, en una conversación exclusiva, el
director Francis Lawrence describió su visión para la secuela, su inmediato encuentro de
tres días con la escritora de la saga Suzanne Collins para preparar un guión, y
cómo el reparto anterior tuvo un momento especialmente
difícil para adaptarse a la pérdida del director de The Hunger Games, Gary Ross.
(Woody Harrelson, que interpreta al mentor de Katniss y Peeta, Haymitch un
arruinado con un torcido trastorno de estrés postraumático).
EW también se sentó con Sam Claflin
el británico
de ojos verdes que ganó el papel del encantador y enigmático chico
dorado, Finnick
Odair del Distrito 4, en su primera entrevista de The Hunger Games.
Describió la
filmación de la infame escena del azucarillo, en el que Finnick se burla
de Katniss mientras llevaba nada más que una red estratégicamente
anudada, "fue el momento más espantoso de mi
vida. Estoy en Twitter y muchas personas te dicen ‘No lo arruines, o te
vamos a
matar '".
Fuentes: popwatch.ew.com, EW
Traducción: Real or Not Real news
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